Puntos clave en una landing page

Una landing page es la página de destino principal a la que dirigimos a los usuarios en una campaña en concreto, ya sea a través de email marketing, en Facebook e incluso en un anuncio en televisión. Los usuarios, atraídos por el interés que hemos provocado, quieren más información sobre ese producto, servicio u oferta que les ha llegado por uno de nuestros canales de atracción de tráfico.

Por ello, el diseño de la landing page, así como su contenido, son cruciales para conseguir que ese nuevo usuario acabe comprando o nos tenga como referencia para un futuro.

A continuación recogemos los puntos clave de toda landing page, los mismos que se explican más en profundidad, con ejemplos y ejercicios en nuestro curso de marketing online.

El contenido:

El texto: las palabras han de persuadir al usuario para que realice una acción y consigamos un micro objetivo (rellenar un formulario, descargarse un pdf, etc). El titular debe ser el mismo o significar la misma idea que la que transmitimos en el email, Facebook, etc. Se ofrece información extra, y el texto incluye las keywords de campaña.

Las imágenes: representan perfectamente el objetivo de la landing page, el producto, oferta o servicio. No olvidemos indicar el texto ALT, pues hay muchas probabilidades que la imagen no se cargue bien.

Formulario: simple, ni largo ni corto, con botón de envío personalizado.

El diseño:

¿Hay concordancia entre el contenido de la campaña y la landing page?
¿Hemos eliminado el menú de navegación para impedir puntos de fuga?
¿El diseño es responsive? ¿Lo podrán ver bien los usuarios que entren con dispositivo móvil?

Experiencia de usuario:

Vigilemos que el “smart content” no nos juegue una mala pasada y aparezca un “Hola <nombre>” a quien no haya rellenado correctamente el formulario. Mejor optar por un “Hola ¿qué tal?”, más genérico.
Enviar un email-resguardo para que aquellos que hayan hecho la acción mediante un dispositivo móvil, tengan un recordatorio para cuando accedan a un laptop o PC.
Comprobar que las páginas de agradecimiento funcionan y que se envía un email de confirmación.

Este es un buen punto de partida. Pero no olvidemos que la optimización de una landing page pasa irremediablemente por un test A/B o multivariable, para conseguir optimizar también la tasa de conversión.